Copa del Mundo Sub-20 Colombia 2011.
A pesar de la crisis económica mundial, Colombia invertirá cerca de 100 mil millones de pesos en estadios de fútbol, sin contar el resto de la infraestructura necesaria para albergar el torneo.
El ‘blindaje económico’ que el Gobierno Nacional dice tener para contrarrestar los efectos de la crisis económica mundial está siendo puesto a prueba fuertemente por estos días. En un país donde el deporte pasa a un segundo, y hasta tercer plano, en materia de inversión anual, será un duro reto: organizar la próxima Copa del Mundo de la FIFA Sub-20, en 2011.
Aquel 27 de mayo de 2008, cuando ya caía la media noche en Colombia, se producía la noticia en Sidney, Australia. La adjudicación de la sede del campeonato del mundo de la categoría juvenil sub-20 para nuestro país en 2011 era un hecho. La FIFA les daba una nueva oportunidad a los cafeteros de organizar un mundial de fútbol, teniendo en cuenta que en 1985 el gobierno de Belisario Betancourt rechazó ser la sede mundialista en 1986 “por razones de orden público”, en medio del apogeo de la mafia de narcotraficantes y la impunidad reinante por aquellos días.
Es sin duda un triunfo político del Gobierno Uribe, y más exactamente de su vicepresidente, Francisco Santos, quien gestionó, junto a Colfútbol (Federación Colombiana de Fútbol) y Coldeportes (Instituto Colombiano para el Deporte), la selección de Colombia como anfitriona del certamen.
Fuente Imagen: http://www.vicepresidencia.gov.co/prensa/noticias/2008/fotos/080527a.jpg
Triunfo del Gobierno Uribe en la medida que logró ‘sacarle’ el Mundial a Venezuela, que era su principal adversario en la contienda por ser el país sede, y más teniendo en cuenta la ventaja venezolana, representada en la infraestructura que dejó la Copa América del 2007.
Pero no todos son triunfos en este proceso, al menos hasta ahora. “Hoy, a dos años de la disputa del Mundial, ninguno de los escenarios presentados por Colfútbol cumple con los requisitos del torneo”, dijo José Orlando Ascencio, subdirector de Deportes del periódico El Tiempo. Colombia, junto con Perú, sede de la última Copa del Mundo FIFA Sub-17, en 2007, son dos apuestas de la FIFA en materia de organización de mundiales en países en vías de desarrollo, donde la mayoría de los estadios son de propiedad de las municipalidades, y no de los clubes, una tendencia creciente en Europa. En el primero de los casos los escenarios requieren inversión estatal para su remodelación.
“Estar preparados sería contar con todos los estadios listos, con la hotelería necesaria en todas las regiones de Colombia y con la infraestructura en cuanto a vías”, dijo Mario César Otálvaro, periodista deportivo.
El Gobierno Nacional y las municipalidades han destinado una cifra cercana a los 100 mil millones de pesos para la readecuación de los ocho estadios que hoy por hoy se mantienen en carrera por ser sedes del Mundial. La FIFA ha recomendado realizar el torneo en cinco o seis estadios, pero no se descarta utilizar los ocho propuestos.
En realidad se trata, hasta ahora, de 84.574’020.000 millones de pesos –cifras de Colfútbol-, pero se está a la espera de la suma necesaria para adecuar correctamente el estadio de Barranquilla, el Metropolitano Roberto Meléndez. Resulta increíble que este estadio no haya sido terminado después de más de 20 años de ser construido -fundado en 1986-. La dificultad radica en la imposibilidad de los Gobiernos Nacional y Distrital de destinar fondos para su adecuación porque los responsables del INDER Atlántico no han suministrado los datos pertinentes para la evaluación del estadio y sus reparaciones.
Existen otros casos preocupantes de estadios que requieren de mucho dinero para estar a punto para poder albergar el torneo. El Estadio Pascual Guerrero, en Cali, que estuvo descartado por sus precarias condiciones y la mala gestión de la Alcaldía para promocionar la ciudad, será el mayor destinatario de fondos gubernamentales para su correcta adecuación: 26.799’020.000 millones de pesos. Se apostará por la capital del Valle del Cauca teniendo en cuenta que es una plaza taquillera, tal y como se evidenció en la Copa América de 2001, cuando fue elegida como la mejor subsede del torneo.
Fuente de Imagen: http://www.nuevoestadio.com/wp-content/uploads/2009/08/Estadio-Pascual-Guerrero02.jpg
“Lo de Cali depende netamente de Cali, de su administración y de lo que realmente cumplan”, explicó Juan Felipe Mejía, jefe de prensa de Colfútbol, a lo que añadió: “Nosotros no sacamos ciudades, ellas se sacan solas, se descalifican solas”, referente a la escogencia final de las sedes.
Muy cerca de Cali se halla otro importante foco de problemas. Palmira, y el nuevo Estadio del Deportivo Cali, están presentando más dificultades de las esperadas. A pesar de no haber sido inaugurado en competición oficial todavía, necesitará de una inversión total que asciende a los 14 mil millones de pesos, de los cuales 4.500 millones de pesos serán aportados por el Estado, aún cuando es de propiedad privada del Deportivo Cali.
Acerca de Cartagena, “para la FIFA fue una gran decepción que no estuviera incluida”, dijo Mejía, siendo el foco cultural e importante distrito económico y empresarial del país. Según Orlando Sotelo, director técnico de Coldeportes, “se le excluyó porque no mostró interés, además tenemos otros ocho estadios para mostrar”.
Edwin Díaz Palma
Periodista Invitado
LA LUPA
Fuente Imagen Sumario: http://gentecorrer.files.wordpress.com/2009/11/futbol-dinero1.jpg
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