La elección de las juntas directivas de clubes tan grandes en España como el Real Madrid y el Barcelona se han convertido en asuntos de Estado, y como todo lo relacionado con ello es política, en la contienda por la presidencia del Barcelona no podía ser de otro modo.
Quien se mete en política debe saber que no tiene segundas oportunidades y el periodo presidencial de Joan Laporta al frente del Barcelona es la muestra más clara de ello. Haberse inmiscuido en ese eterno debate independista catalán le ha pasado una factura carísima, que lo tiene al borde de convertirse en el próximo ex presidente del Barcelona.
Con un palmarés envidiable, pasará a la historia por presidir el mejor Barça de la historia, como también será recordado por haber sido el único presidente del club a quien se le promovió una moción de censura para alejarlo del cargo.
Las salidas en falso de Laporta van desde una serie de apoyos desafortunados a las campañas independistas de Cataluña hasta un escándalo de espionaje a los vicepresidentes y socios más influyentes del club, pasando por el manejo desesperado de situaciones difíciles del vestuario, que terminaron con las ventas de Ronaldinho y Samuel Eto’o, que pasaron a ser dos de las principales figuras del equipo a ser los parias, y como todos ellos, salieron por la puerta trasera.
Ante semejantes gazapos dirigenciales, una junta directiva inquisidora de sus decisiones y la presión mediática recordándoselas, Laporta se juega la última carta de su baraja que, para sorpresa de muchos, es un as: la renovación de Joseph Guardiola como director técnico del equipo, al menos por una temporada más.
La imagen de Laporta y Guardiola sellando la renovación le dio la vuelta al mundo del fútbol, y de paso fue un golpe de viraje en la campaña por la presidencia del club. Puede ser esta renovación la tabla de salvación del presidente en su camino a la reelección, aún cuando tal renovación no se firme hasta que se posesione el nuevo presidente, o se re posesione el actual.
Triunfo de Laporta en la medida que logró persuadir al mejor técnico de los últimos años para que renovara con el club, aunque no se haya firmado aún. Una imagen que le valdrá una buena cantidad de votos en procura de su objetivo reeleccionista. Una imagen que representará unos cuantos miles de votos para el mocionado hombre de las caídas políticas en falso y del espionaje vicepresidencial.
Edwin Díaz Palma
Periodista LA LUPA
lalupaopinion@gmail.com
Fuente fotografía sumario: MSN Deportes. http://estb.msn.com/i/62/97C28B55D812624DF44BF7B77BD1D3.jpg
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