lunes, 1 de febrero de 2010

Sociedad - CUANDO LA GRIPA SE VOLVIÓ NEGOCIO




Luego de casi un año de ser descubierto el primer caso de la Gripa A(H1N1) en México, el tema ha perdido visibilidad y ha ido quedando en el olvido. Mientras, las farmacéuticas -al parecer- han logrado llevarse el premio mayor. 




Con el tiempo, ha tomado cada vez más fuerza la acusación contra la Organización Mundial de la Salud (OMS) de estar vinculada con las grandes empresas farmacéuticas que fabrican los medicamentos y vacunas que atacan y previenen el virus de la gripa A.  Y es que además, es la misma OMS quien pone a dudar al mundo sobre su imparcialidad en el asunto, ya que en estos días en la audiencia pública "La gestión de la pandemia H1N1: ¿hace falta más transparencia?" realizada por la Asamblea Parlamentaria del Consejo de Europa, se decidió hacer un cambio a la definición clásica del término Pandemia. Con esta variación, la Organización pretende salir del embrollo en el que se ha involucrado al decretar un estado de emergencia exagerado respecto al brote de la influenza.

Con el alarmismo que se ha tratado el tema, se ha conseguido que países como Francia hayan invertido una cifra exorbitante en la compra de 94 millones de dosis de la vacuna, de las cuales solamente han sido utilizadas 5 millones. Ahora, el país europeo se encuentra revendiendo el elevado excedente del medicamento y es una víctima de la exageración que ha llevado a enriquecer a los laboratorios farmacéuticos.

Pero, esta era una situación que veía venirse desde el inicio del virus. Mark Honigsbaum, investigador inglés, escribió en abril de 2009 para el diario británico The Guardian que más de 10.000 personas mueren en Inglaterra anualmente en la temporada de invierno en la que se propaga la gripa corriente. Esto nos muestra que la OMS aprovechando la ignorancia de la población acerca de las cifras, se apresuró a lanzar advertencias sobre la devastación inminente que provocaría el nuevo virus. Los gobiernos se dejaron llevar por los argumentos de la Organización y, se generó un caos en los sistemas de salud a causa del pánico infundado a las personas alrededor del mundo.

Sumado a esto, hay que tener en cuenta los avances científicos que hoy en día permiten controlar a tiempo un virus de este tipo. Para la pandemia de “gripa española” en 1918 no se contaba con la tecnología y el personal calificado para desarrollar una solución que evitara las 50 millones de vidas que cobró el virus. En la actualidad la situación es completamente diferente. ¿Estrategia o realidad? Veremos en qué momento y bajo qué contexto llegará la tercera oleada de la gripa. ¿Es acaso este otro caso de corrupción?

Fernanda Basto Reyes
Periodista LA LUPA
lalupaopinion@gmail.com  

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